El aspirante señala que en  Diciembre del 2013 el mandatario solicitó y recibió en dos partes un millón de soles a cambio de la buena pro obra cuando era gobernador regional de Moquegua .

​

1.¿Porque se le acusa?

​

A Vizcarra se le acusa por solicitar el monto de un millón de soles en el segundo piso de un edificio de la calle Emilio Cavenecia 225, San Isidro que coincide con la dirección de Obrainsa y también por recibir un pago ilícito por el Consorcio Obrainsa – Astaldi por la obra de Limas de Ilo . Este pago fue recibido en dos partes , 400 000 soles fueron entregados dentro de un sobre manila y el otro fue 600 000 soles por el mismo proceso.

​

​

 2.¿ Con quien se reunió Vizcarra?

​

Tuvo dos reuniones con Elard Tejeda , gerente general de Obras de Ingeniería Obrainsa, y luego de ello se realizo el desembolso.

El aspirante también informó que Martín Vizcarra y Tejeda se comunicaron por teléfono el 3 y 4 de noviembre del 2013. El mandatario le informo que se encontraba en Lima , es por ello que la reunión se dio en la sede de Obrainsa , en San Isidro.

​

​

3.¿Que dijo el mandatario sobre la acusación?

​

El presidente de la República se pronunció en una entrevista en Panorama, sobre el nuevo caso en el que esta involucrado y es acusado por un aspirante a colaborador. Según el mandatario no existe delito alguno debido a que , la acusación no tiene pruebas. Nosotros desde que asumimos el Gobierno tomamos decisiones drásticas contra los actos de corrupción , señalo el presidente Vizcarra.

​

​

4. ¿ Tuvo contradicciones el presidente Vizcarra ?

​

El jefe de Estafo manifestó , que no fue a la reunión convocada el 3 y 4 de noviembre en las oficinas de Obrainsa , donde se discutiría el proyecto que estaba en proceso de licitación .

Luego de ello confeso que , ellos brindaron el valor referencial del proyecto ." Nosotros no le damos a Unops los expedientes técnicos con lo montos referencial " señalo.

Las incertidumbres siguen en torno al proceder del presidente Martín Vizcarra durante su gestión en el GORE. La caldera sigue ardiendo en la política peruana.